#ComunicadOIA
49 familias indígenas afectadas por las fuertes lluvias en Vigía del Fuerte
Las fuertes lluvias que se registran en todo el territorio nacional, especialmente en el departamento de Antioquia, dejan también afectadas a 260 personas indígenas del pueblo Embera Dóbida, que hacen parte de la comunidad Jengadó, del Resguardo Jengadó del municipio de Vigía del Fuerte.
En los últimos días, la creciente súbita del Río Jengadó, uno de los afluentes que hacen parte del Río Atrato, arrasó a su paso con grandes áreas de cultivos de pancoger, galpones de gallinas, codornices y patos, así como algunos cerdos y bovinos que murieron durante el fenómeno natural.
Hay que señalar, que no sólo el desabastecimiento de alimentos es lo que tiene en jaque a los integrantes de este pueblo ancestral de Antioquia, sino también el abastecimiento de agua, que se genera directamente del río, y que por los movimientos en masa que se han registrado tras la creciente súbita, tienen inconsumible este vital recurso, por su alto nivel de arcillas y arenas.
Sin embargo, la alta erosión de los terrenos aledaños al río, sumado a la caída de árboles, ha dejado en la parte alta de este afluente, una taponamiento, lo que ha generado que hoy esta comunidad afectada, vea la disminución del caudal del río y el aumento de los bancos de arena a sus orillas, afectado no sólo la movilidad de la población indígena al casco urbano, sino que también poniendo en alto riesgo a los habitantes de 33 viviendas, que podrían ser arrasadas tras una eventual creciente palizada, como consecuencia de este represamiento.
Es de anotar, que la misma situación se registra en las comunidades indígenas de otros tres resguardos: Jarapetó, Partadó, El Salado Paracucundó y Guaguandó, por lo que como Organización Indígena de Antioquia y Cabildo Mayor de Vigía del Fuerte, hacemos un llamado al Gobierno Local, Departamental y Nacional, así como al Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Antioquia -DAGRAN-, no sólo para que verifiquen la situación actual de las familias desabastecidas, sino también para que con Corpourabá se tomen acciones medioambientales, para evitar una gran palizada y avalancha como la que se registró en el Resguardo Río Murindó que dejó no sólo afectaciones a la vida humana, sino también consecuencias medio ambientales irreversibles para la fauna y flora.
De manera pública dejamos constancia de este represamiento en la parte alta del Río Jengadó, que hoy podría poner en riesgo la vida e integridad de las comunidades indígenas y negras que habitan en su ribera.
Comentarios
Publicar un comentario